Comunicando Web - Diseño Web & Comunicación

martes, 11 de diciembre de 2007

Siempre apurados...Se solicitan contenidos cortos!!!

Resumen: Internet, como medio de comunicación, supone un nuevo reto para el usuario: cómo administrar y filtrar las avalanchas de información generadas por este medio. No hay tiempo, en teoría, para leer textos muy largos, por lo cual una revisión de las necesidades del usuario adaptadas a este medio se hace necesaria. Pero cabe preguntar ¿qué tan distinto debe ser el contenido para que éste sea digerido de lleno por su usuario y qué tan distinto es el papel del usuario cuando elige a otros medios de comunicación? Contenido vs. tiempo ¿sólo un problema de Internet?

Comencemos por el hecho de que si están leyendo este párrafo es porque el resumen les interesó y por ende quieren dedicarle a este escrito unos minutos más. No se trata de tener o no tener tiempo, de que la rutina cotidiana nos impida leer y adjudicar un espacio para la información o el contenido que nos ofrecen los distintos medios de comunicación, simplemente es algo tan sencillo y básico como el hecho de que el usuario es y siempre ha sido el que elige el momento y la longitud dedicados a ese tema, información, contenido, etc., que le llame la atención. ¿Quiénes de ustedes han pensado alguna vez que los contenidos de Internet deberían ser más cortos para que así pudieran absorber más y en menor tiempo? ¿No les ha sucedido lo mismo leyendo el periódico, escuchando un programa de radio o viendo comerciales de televisión?

A mi manera de ver, los contenidos (sobretodo los escritos) tienen el objetivo principal de que los lean, pueden tratar de ser concisos, no redundar en ideas, pero tampoco deberían pecar de omisión y dejar de explicar puntos fundamentales con la excusa de que el usuario no tiene tiempo. Cada contenido tiene un target, ellos son la razón por la cual se generan y realmente el truco está en conocerlo, qué le gusta y qué no le gusta, a qué temas le dedica más tiempo y a cuáles no y saber diferenciar entre contenidos meramente informativos (los cuales sí deberían ser cortos y con datos específicos) de aquellos que proporcionan información detallada, o de opinión/reflexión, o de investigación. A la hora de la verdad ¿qué es un contenido corto? ¿No será nuestra percepción visual un factor determinante en la elección de dichos contenidos?

Todos los medios (radio, prensa, televisión, Internet, publicidad exterior) compiten por lo mismo: captar la atención del usuario. Y vuelvo y repito, sólo nosotros como usuarios decidimos a qué le dedicamos 1 min ó 5 ó 10; porque cuando realmente nos interesa algo, empleamos toda nuestra atención y generamos en nuestra agenda ese "espacio" que supuestamente no tenemos porque siempre andamos apurados, ya sea para esparcir nuestra mente, para enterarnos de la vida de un familiar que está lejos, para comparar productos, investigar sobre un tema que nos ayudará en nuestro campo laboral o estudiantil, en fin. Y si no, pregúntenle a un fanático de Harry Potter de dónde saca el tiempo para leerse un libro tan gordo en tan pocos días (incluso horas). Le gusta, le interesa, saca el tiempo y punto.

En el caso específico de Internet, la percepción psicológica de "no hay tiempo", "este correo es muy largo, lo leo más tarde", "pero este texto no tiene resumen", es un factor que obviamente determina la manera de realizar muchos de los contenidos para este medio, ya que como cualquier otro, necesita de estrategias y lineamientos que faciliten su usabilidad y por ende le garanticen una continuidad de uso por parte de los usuarios. Pero aparte de esto, creo que la mente nos engaña, hay textos que parecieran largos, pero que cuando se leen de principio a fin sólo tardamos de 3 a 5 min. ¿La gente no tiene siquiera 5 min para leer? ¿Cómo debería ser entonces el contenido web (de texto) en Internet y cuáles serían las excepciones? ¿Realmente captaríamos, aprenderíamos, conoceríamos la información si se nos entregase sólo en dos párrafos?

Obviamente, no estoy proponiendo generar textos extremadamente largos para que se entienda un punto de vista, considero que todo contenido, según su temática, tiene su justa medida. Lo que propongo más bien como reflexión es: ¿Hasta qué punto debemos limitar un escrito para que la gente lo quiera leer? ¿Ustedes como usuarios sienten que mucho texto=agobio?

Nota: Para aquellos que les interese ahondar un poco más en las técnicas más recomendadas para escribir artículos en Internet les dejo los siguientes enlaces:

domingo, 25 de noviembre de 2007

Cómo duele agarrar un lápiz!!!

El fin de semana del 17 y 18 de noviembre se celebró en Madrid el I Congreso de Webmasters 2007, del cual me enteré a última hora y por pura casualidad y con gran fortuna tuve la oportunidad de asistir. Al día siguiente de finalizar el congreso, le escribí un correo a la organizadora, Ma. Rosa Diez, en donde una de las ideas principales que le expresé fue la siguiente: "Es el primer congreso al que he asistido en donde no me aburrí, en donde encontré todas las ponencias súper interesantes, relevantes y dinámicas, así como quedar gratamente sorprendida por la calidad de los ponentes que fue definitivamente superior. Cada uno de ellos, gracias a sus experiencias personales y laborales, hicieron de cada una de las charlas un momento motivante, lleno de reflexiones e inquietudes (por lo menos para mí) que son fundamentales en el mundo del diseño web, Internet como medio de comunicación, desarrollo, estrategias de posicionamiento, comunidades virtuales, contenido, en fin..."

La experiencia del congreso, además de ser excepcional, me hizo darme cuenta de una situación curiosa, no todos los días tengo la necesidad de tomar apuntes durante varias horas seguidas, mucho menos dos días seguidos; mi forma habitual de escribir en el día a día es a través de un teclado, por lo cual la falta de costumbre para escribir a mano, como cuando estaba en el colegio o la universidad, se nota un montón. Sabrán a lo que me refiero, la mano se engarrota, le cuesta tener soltura y luego de un buen rato los dedos índice y medio empiezan a doler, presentar hundidos y colores rojizos con claros indicios de la formación próxima de un pequeño callo. Es interesante cómo el uso de la tecnología, en este caso específico del ordenador, puede hacer que la persona pierda la práctica de la palabra escrita con su propio puño y letra.

En el congreso, mirando a mi alrededor, podía observar como muchos de los asistentes habían traído sus portátiles para escribir directamente sus impresiones de cada una de las ponencias y, en muchos de los casos, conectarse vía WiFi a Internet para publicarlo en sus respectivas páginas o blogs, manteniendo al resto de la comunidad cibernética informada. Luego, estaban los que con sus cámaras fotográficas digitales le tomaban fotos, no sólo a los ponentes, sino también a las diapositivas proyectadas en sus presentaciones para así evitar tomar apuntes manuales, prestarle mayor atención a las explicaciones y obviamente para no perderse ningún detalle de lo escrito en las mismas, ya que como todos sabemos tratar de copiar láminas de presentación de una manera rápida y con todo su contenido no es tarea sencilla y a veces puede ser hasta frustrante (o le prestas atención al ponente o copias las diapositivas). Lo de la cámara me pareció una solución ideal, pero se me olvidó en casa para el segundo día del congreso, así que tuve que seguir tomando apuntes.

A pesar de que tanto los organizadores del congreso como los mismos ponentes nos aseguraban que "colgarían" sus presentaciones on-line, el hecho de escribir a mano tiene un punto positivo. A mi manera de ver, plasmar en papel lo que vas viendo y escuchando ayuda a tu cerebro (por lo menos al mío) a recordar con mayor precisión las ideas expuestas, incluso si son anotaciones y no copias textuales de diapositivas, ya que luego al revisarlas te acuerdas con mayor facilidad de las cosas que se discutieron en el momento y por supuesto las que te causaron mayor impresión e importancia. También esas anotaciones manuales las puedes doblar, guardar en tu cartera o bolso para luego sacarlas en cualquier momento sin la necesidad de encender una máquina.

Escribir, comunicarnos, decir lo que pensamos o sentimos es intrínseco de la naturaleza humana. ¿Qué importa entonces si esa comunicación escrita es realizada a través de un papel o de un ordenador?

Si tomamos en cuenta que Internet y el mundo de los blogs ha permitido que la opinión, trabajos literarios/ficción, inquietudes, reflexiones, etc., de muchas personas salgan a la "luz pública" y no se queden engavetadas, escritas a mano, en algún rincón de sus habitaciones u oficinas, entonces pudiéramos aventurarnos a afirmar que Internet ha abierto la puerta a un nuevo Renacimiento de la palabra escrita. Si bien es cierto que no todo lo publicado en Internet necesariamente es veraz o de interés para el colectivo mayor, personas que antes no tenían voz ahora la tienen.

¿Importa entonces agarrar un lápiz, un bolígrafo, una pluma, para plasmar ideas? Para aquellos que son absolutamente románticos e ideales, probablemente la respuesta sea afirmativa, incluso para los que defienden que una primera o varias ideas en papel luego se transforman en una obra maestra del intelecto (incluidos matemáticos, físicos, etc.), también lo será. ¿Ustedes qué opinan?

A la final, esta pequeña anécdota que estoy compartiendo del congreso de webmasters es más que todo con la intención de hacer, si se quiere, una reflexión acerca de nuestro uso cotidiano del ordenador como herramienta para escribir y no un simple lápiz y papel, ya que pareciera que este acto se ha vuelto un tanto obsoleto. ¿Quiénes de ustedes escriben a mano todos los días por un período de dos horas o más? , ¿Quiénes de ustedes prefieren escribir con teclado porque les parece más rápido y más legible? y ¿Quiénes de ustedes estarían de acuerdo con la frase: "Como duele agarrar un lápiz"?

miércoles, 21 de noviembre de 2007

¿Quién puede vivir sin Internet?

¿Quién de ustedes puede decir con toda honestidad que es capaz de vivir sin Internet? ¿Puedes pasar más de dos días sin revisar tu correo electrónico, sin conectarte al messenger, sin navegar aunque sólo sea 5 minutos para buscar lo que sea? Yo definitivamente no puedo, se ha convertido en parte de mi rutina. Es tan así, que incluso durante la luna de miel con mi esposo en donde nos fuimos 8 días para ver las Fallas de Valencia, el hecho de no poder estar conectada me generó cierta ansiedad, sentía que me faltaba algo, y a pesar de que disfruté nuestro viaje un montón, el hecho de regresar a casa y poder sentarme frente al ordenador para meterme en Internet tuvo un efecto totalmente sosegador.

Internet, como medio de comunicación es todavía muy joven comparado con la radio o la televisión, pero aún así, cada vez gana más terreno a medida de que éste se va haciendo más accesible a las personas, no sólo en sus casas o lugares de trabajo, sino también en centros de comunicación o locutorios. Y como lo reseñó Stephanie Falla Aroche en Maestros del Web, Internet es a la vez una oportunidad de difusión mundial, un mecanismo de propagación de la información y un medio de colaboración e interacción entre los individuos y sus ordenadores independientemente de su localización geográfica. Ya no tenemos que esperar semanas o meses para recibir una carta por correo, o depender exclusivamente de una máquina de fax para mandar una comunicación a otra parte del mundo, o incluso del teléfono para hablar con nuestros seres queridos que están a kilómetros de distancia.

Internet se ha caracterizado por ser ese medio capaz de generar una sensación de inmediatez en las comunicaciones a un bajo costo, con una mayor oportunidad de interacción entre los usuarios y entregándoles un poder que los demás medios no les permitían (por lo menos a cabalidad): elegir el tipo de información o contenido desde cualquier momento y ubicación, así como formar parte del proceso, involucrarse, contribuir, ser escuchados por "todos".

Si buscamos en la Wikipedia sobre la historia de Internet, encontramos que la "red de redes" o la WWW se introdujo al mundo como una red global a principio de los '90. Yo particularmente comencé a utilizar este medio a partir de 1996 cuando ingresé a la universidad, y desde aquella época hasta el sol de hoy han pasado 11 años, años en los cuales el mundo cibernético me ha capturado cada día un poco más y ahora no me puedo imaginar sin él, sin buscar información en Google, sin revisar mis cuentas de correo electrónico, sin intentar escribir en mis blogs (los cuales sólo descubrí recientemente), sin buscar nuevos juegos de PC, sin diseñar páginas web que puedan ser vistas y "admiradas" por otros, sin revisar estadísticas que me permitan comprender a los usuarios, sin aprender cosas nuevas y conocer gente nueva...

En definitiva, es evidente que Internet forma parte de mi vida y es una parte importante de cómo me relaciono con el resto del mundo, pero me pregunto ¿cuántos más se sienten como yo? ¿Quiénes definirían a Internet como un apéndice más de su forma de ser o de hacer las cosas? ¿Eres tú, lector de esta pequeña reflexión, uno de ellos?